El mercader, el portal y las curvas del tiempo: ciencia y ficción en Ted Chiang
20 Junho 2025
Escrito por Francisco H. C. FelixTed Chiang, en su premiado relato “El Mercader y el Portal del Alquimista”, construye una narrativa fascinante en torno a un concepto científico real: las curvas cerradas tipo tiempo. Curva cerrada tipo tiempo: Trayectoria en el espacio-tiempo que regresa al mismo punto, permitiendo en teoría viajes en el tiempo sin violar las ecuaciones de la relatividad general. Inspirado por una conferencia del físico Kip Thorne, Chiang explora la idea de trayectorias en el espacio-tiempo que regresan al mismo punto — es decir, viajes en el tiempo matemáticamente posibles.
Portada de la edición original de “The Merchant and the Alchemist’s Gate”. Imagen de Subterranean Press, publicada en Wikimedia Commons bajo licencia Creative Commons Attribution 3.0 Unported.
Antes de perdernos en paradojas y portales, vale la pena preguntar: ¿qué es el tiempo? Mucho antes de que el tiempo fuera tema de la filosofía occidental, los hindúes ya escribían en los Vedas sobre ciclos de creación y destrucción que duraban más de 4 millones de años cada uno. El egipcio Ptahotep decía que la pérdida de tiempo era una abominación (¿quizás anticipando a Novikov? - véase más adelante). Los incas veían el espacio y el tiempo como una sola cosa: pacha. Y, probablemente, los antiguos hablantes del proto-semítico ya tenían el concepto de tiempo remoto y de un origen del tiempo.
Para Aristóteles, el tiempo no era una entidad independiente, sino la medida del cambio — solo existe tiempo porque las cosas cambian. Newton, en cambio, veía el tiempo (y el espacio) como absolutos, un escenario fijo donde todo sucede, independientemente de lo que exista o cambie. Einstein trajo la gran sorpresa: el tiempo puede “estirarse” o “encogerse” dependiendo de la velocidad y la gravedad, volviéndose relativo al observador. Relatividad: Teoría física desarrollada por Einstein que revolucionó la comprensión del espacio, el tiempo y la gravedad, mostrando que son relativos al observador. Otros filósofos también dieron sus interpretaciones, pero ninguna cambió tanto nuestra comprensión como la física moderna.
¿Pero qué son esas curvas? En términos técnicos, son “líneas del universo cerradas de un distribuidor Lorentziano en el espacio-tiempo”. Traducido: son trayectorias que permiten a un objeto volver al mismo punto en el espacio y en el tiempo. La primera solución matemática para este concepto fue encontrada por Willem Jacob van Stockum en 1937, y luego confirmada por Kurt Gödel en 1949, ambos usando las ecuaciones de campo de Einstein.
Antes incluso de hablar de viajes en el tiempo, Karl Schwarzschild — aventurero, alpinista y físico — encontró la primera solución exacta de las ecuaciones de Einstein durante la Primera Guerra Mundial. Agujero de gusano: Solución teórica de las ecuaciones de Einstein que conecta dos puntos distintos del espacio-tiempo, funcionando como un atajo cósmico. Su solución abrió el camino para el concepto de agujeros de gusano, que más tarde serían considerados posibles mecanismos para curvas cerradas del tiempo. Si alguien debía ser un viajero en el tiempo, sería él.
Uno de los conceptos que más fascinó a Chiang fue el principio de autoconsistencia de Novikov (un astrofísico y cosmólogo ruso, conocido por sus contribuciones a la física de los agujeros negros, la cosmología y, especialmente, al estudio de los viajes en el tiempo). Principio de autoconsistencia de Novikov: Postula que los eventos que causarían paradojas temporales tienen probabilidad cero de ocurrir, haciendo que el universo sea “autoconsistente”. Este principio postula que la probabilidad de líneas del universo que causan paradojas temporales es cero. Es decir, el universo “se ajusta” para impedir paradojas, haciéndolas imposibles.
En los años 90, Thorne y otros físicos encontraron soluciones matemáticas que sugieren la existencia de infinitas curvas cerradas del tiempo que evitan paradojas. Paradoja temporal: Situación hipotética en la que una acción en el pasado altera el futuro de forma contradictoria, como impedir el propio nacimiento. Esto podría usarse en agujeros de gusano atravesables — verdaderas “ventanas” al pasado o al futuro, pero siempre en líneas del universo donde los paradojas no pueden ocurrir. El resultado sería similar a la descripción de Chiang en su relato, algo muy diferente al agujero de gusano del libro Contacto, de Carl Sagan.
Chiang es un maestro en crear relatos alrededor de conceptos científicos singulares, siempre en escenarios de fantasía novelada. “El Mercader y el Portal del Alquimista” ganó los premios Nebula y Hugo en 2008, mostrando cómo la buena ciencia ficción puede nacer de ideas matemáticamente posibles, pero aún misteriosas para la mayoría de nosotros.
Ted Chiang es un escritor estadounidense de ciencia ficción, conocido por sus historias que exploran conceptos científicos y filosóficos profundos. Su obra más popular es el relato “Story of Your Life” (“La historia de tu vida”), que fue adaptado al cine en la premiada película “La Llegada” (“Arrival”, 2016), dirigida por Denis Villeneuve. Chiang ha recibido varios premios importantes de la literatura fantástica, incluyendo el Nebula, el Hugo y el Locus.
P.D.: Los conceptos discutidos en esta publicación también se aplican a otras obras de ficción en diferentes medios, como la serie de Netflix “Dark” y el anime “Steins;Gate” — cada una de ellas merece, en el futuro, una publicación propia.